Pastel Bretón con Manzana y Confitura de Leche

Un bocado exquisito. No tengo otra forma mejor de describir este pastel. Mi pasión por los postres con manzana ha subido de nivel gracias a él. El reto era grande porque al verlo y ver uno de sus ingredientes empezó una búsqueda en paralelo. Tenía que encontrar la manera de preparar yo la Confitura de Leche, pues es uno de los ingredientes principales de este pastel de manzana. De hecho creo que sin ella, estaría muy, muy bueno, pero es ella la que le hace llegar a la exquisitez.

Y la encontré, en un libro de cocina francesa, todo un descubrimiento… Y aquí os dejo la receta inspiradora de este exquisito pastel: Recettes Bretonnes

Gâteau breton aux pommes et à la confiture de lait 

Pastel Bretón con Manzana y Confitura de Leche

Ingredientes para preparar Pastel Bretón con Manzana y Confitura de Leche

• 2 manzanas Reineta o Golden
• 100 gr de azúcar
• 150 gr de mantequilla
• 3 huevos
• 4 cucharadas soperas de Confitura de Leche
• 250 gr de harina de trigo
• 1/2 sobre de levadura química
• Ralladura de 1/2 limón
• 1 sobre de azúcar avainillado
• 1 cda de postre de pan rallado

Elaboración del Pastel Bretón con Manzana y Confitura de Leche

Lo primero que haremos será pelar y partir las manzanas en trocitos y mezclar en un bol con la Confitura de Leche.

Vamos a preparar la masa. En primer lugar batiremos huevos con azúcar, mantequilla fundida y harina. Una vez conseguida una masa homogénea, añadiremos la ralladura de limón, la levadura y el azúcar vainillado.

La levadura ya mezclada nos permite un margen de tiempo antes de la cocción. Así que vamos a precalentar el horno a 180 grados mientras prepararemos el pastel para hornear.

Untaremos una fuente con mantequilla, por encima el pan rallado, espolvoreado, y terminaremos con una capa de azúcar avainillado. Dentro de un momento os mostraré qué se consigue con ello.

Pondremos en el fondo la mitad de la masa y extenderemos de forma uniforme.

A continuación distribuiremos bien la manzana mezclada con la confitura de leche.

Cubirmos con el resto de la masa y alisamos bien.

Introducimos en el horno y en unos cuarenta minutos lo tendremos perfectamente horneado. De todas formas, como siempre decimos, cada horno es un mundo, así que pincharemos en el centro con un cuchillito de punta y si no sale seco, esperaremos unos minutos más.

Dejamos enfriar diez minutos y ya podemos con cuidado darle la vuelta y dejar enfriar sobre una rejilla.

Y ahora me interesa enseñaros una foto desde más cerca. Esa capa que pusimos con mantequilla, pan rallado y azúcar avainillada ha creado una base crujiente que al morder un trocito de este pastel, lo hace todavía más especial.

Pues este pastel es mi aportación para el día de la Madre, un día que se alarga eternamente, porque se es madre para toda la vida, cada año, cada mes, cada semana, cada día, cada hora, cada minuto, cada segundo…hasta el infinito.

Felicidades a todas las mamis del mundo.

Si os ha gustado este pastel francés, os recomiendo el Pastel francés Tropèzienne

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                                                                                    Hasta la próxima receta 😀 

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                                                                                                      Inma 💖